Invitan a vivir el Adviento como tiempo de preparación espiritual

El obispo de la Diócesis de Ciudad Valles, Roberto Yenny García, hizo un llamado a las familias para vivir el Adviento como un tiempo de preparación del corazón y de reencuentro con el sentido espiritual de la Navidad.

Explicó que la coronita o Corona de Adviento es un signo que acompaña este proceso, pues cada domingo se enciende una vela y se realiza una breve oración en familia, lo que ayuda a fortalecer la unión y la reflexión espiritual.

La Corona de Adviento está conformada por un aro de follaje verde —generalmente de pino o abeto— que simboliza la vida y la esperanza. Su forma circular representa la eternidad y el amor infinito de Dios. Lleva cuatro velas colocadas de manera equidistante, que se encienden una por semana: tradicionalmente tres son moradas y una rosada, aunque en algunas comunidades se utilizan velas blancas. Cada luz encendida recuerda la espera vigilante, la preparación, el gozo y la cercanía del nacimiento de Jesús.

Su elaboración suele realizarse de forma artesanal en hogares y parroquias. El aro se forma con ramas naturales o artificiales y se complementa con listones, piñas, frutos secos o elementos decorativos que no alteran su significado religioso. Lo esencial es el acto de encender cada vela acompañado de oración y reflexión familiar.

Este tiempo litúrgico, afirmó monseñor Yenny García, es una oportunidad para bajar el ritmo, reenfocar la atención en aquello que muchas veces se descuida —como la relación con Dios, el crecimiento interior y la reconciliación con los seres queridos— y vivir la Navidad desde su sentido más profundo.